“Tenemos la obligación de preservar la claridad en la identificación de los sujetos que
estamos de uno y de otro lado de la línea divisoria que históricamente existe entre ambos
campos”, sostiene Nuevo Encuentro.
Desde Nuevo Encuentro auspiciamos, para esta nueva etapa que inicia a partir de la asunción de las autoridades electas en nuestras ciudades y provincia, que podamos como pueblo seguir creciendo, y continuar con la transformación social y los ideales de inclusión, solidaridad, distribución equitativa de la riqueza y, en definitiva, de igualdad y libertad, para la felicidad del pueblo.
Que juntamente a los Intendentes, Concejales, Legisladores, Diputados, Senadores y Gobernadora electos podamos, en la gestión, fortalecer la alternativa de unidad que supimos construir para transitar el proceso electoral que movilizara el apoyo mayoritario de la población, con todos los matices y las discusiones que en todos proceso y sujeto colectivos son naturales, pero siempre dentro de los lineamientos básicos del proyecto nacional, popular y democrático que propusimos al pueblo y que éste eligió, en clara diferenciación respecto de otras alternativas expresivas del campo anti nacional y anti popular.
Es evidente que al resolverse de modo diferente la elección presidencial en instancia de ballotaje las perspectivas locales cambian respecto de lo que nuestra provincia eligió cuando mayoritariamente votó por el Frente para la Victoria en todos los estamentos. Si bien esto impone revisar y adaptar un montón de cuestiones en materia de ejercicio del gobierno, no cambia el contenido del pacto social sellado en nuestras ciudades y provincia a partir de la propuesta electoral kirchnerista que lleváramos y que la sociedad prefirió, la que con claridad y convicción diferenciamos de las propuestas del campo oligárquico que sintetizaba UNIR TDF.
Tenemos la obligación de preservar la claridad en la identificación de los sujetos que estamos de uno y de otro lado de la línea divisoria que históricamente existe entre ambos campos, priorizando los intereses del pueblo y posponiendo los sectoriales y personales en tanto entren en contradicción con aquéllos. Confundir esto suele llevar a lo que el Martín Fierro nos previene cuando nos recomienda ‘la unidad entre los hermanos’, cayendo en enfrentamientos o divisiones que terminan siendo funcionales y aprovechadas por las minorías que sostienen la reproducción de aquello que vinimos a transformar en defensa y representación de las mayorías y por mandato de éstas.
Ese pacto social y ese proyecto se respetan y se deben cumplir y en ello el Nuevo Encuentro va a estar donde haga falta para ayudar, también en cumplimiento de los compromisos asumidos ante el pueblo durante las campañas electorales, como sujeto parte que fuera de los resultados referidos. Estamos convencidos de que la mejor suerte de este desafío, en beneficio de los intereses del conjunto de la sociedad, con la centralidad de los de los sectores populares, en un contexto político nacional, regional y mundial de dificultades complejas, va a depender de que las diferentes agrupaciones del frente seamos capaces de preservar y fortalecer la unidad de proyecto y base ideológica, en la diversidad que nos caracteriza, tal como lo lográramos en las elecciones, movilizando las esperanzas de la sociedad fueguina, las cuales no podemos frustrar.
Así nos lo enseñaron Néstor y Cristina, y así nos lo enseña, en la parte del kirchnerismo que como Nuevo Encuentro nos toca representar en el Frente para la Victoria, Martín Sabbatella.
Y así lo haremos, desde Tierra Del Fuego y para la Argentina toda: a defender lo conquistado; a resistir cualquier intento de recorte en los derechos ampliados; a ganar en 2017 y a volver en 2019, para restablecer y profundizar el rumbo recuperado en 2003, por todo lo que nos faltó realizar hasta acá.
Unidos, organizados, solidarios y movilizados, para la liberación. Hoy, como siempre y más que nunca, PATRIA SI, COLONIA NO.
Desde Nuevo Encuentro auspiciamos, para esta nueva etapa que inicia a partir de la asunción de las autoridades electas en nuestras ciudades y provincia, que podamos como pueblo seguir creciendo, y continuar con la transformación social y los ideales de inclusión, solidaridad, distribución equitativa de la riqueza y, en definitiva, de igualdad y libertad, para la felicidad del pueblo.
Que juntamente a los Intendentes, Concejales, Legisladores, Diputados, Senadores y Gobernadora electos podamos, en la gestión, fortalecer la alternativa de unidad que supimos construir para transitar el proceso electoral que movilizara el apoyo mayoritario de la población, con todos los matices y las discusiones que en todos proceso y sujeto colectivos son naturales, pero siempre dentro de los lineamientos básicos del proyecto nacional, popular y democrático que propusimos al pueblo y que éste eligió, en clara diferenciación respecto de otras alternativas expresivas del campo anti nacional y anti popular.
Es evidente que al resolverse de modo diferente la elección presidencial en instancia de ballotaje las perspectivas locales cambian respecto de lo que nuestra provincia eligió cuando mayoritariamente votó por el Frente para la Victoria en todos los estamentos. Si bien esto impone revisar y adaptar un montón de cuestiones en materia de ejercicio del gobierno, no cambia el contenido del pacto social sellado en nuestras ciudades y provincia a partir de la propuesta electoral kirchnerista que lleváramos y que la sociedad prefirió, la que con claridad y convicción diferenciamos de las propuestas del campo oligárquico que sintetizaba UNIR TDF.
Tenemos la obligación de preservar la claridad en la identificación de los sujetos que estamos de uno y de otro lado de la línea divisoria que históricamente existe entre ambos campos, priorizando los intereses del pueblo y posponiendo los sectoriales y personales en tanto entren en contradicción con aquéllos. Confundir esto suele llevar a lo que el Martín Fierro nos previene cuando nos recomienda ‘la unidad entre los hermanos’, cayendo en enfrentamientos o divisiones que terminan siendo funcionales y aprovechadas por las minorías que sostienen la reproducción de aquello que vinimos a transformar en defensa y representación de las mayorías y por mandato de éstas.
Ese pacto social y ese proyecto se respetan y se deben cumplir y en ello el Nuevo Encuentro va a estar donde haga falta para ayudar, también en cumplimiento de los compromisos asumidos ante el pueblo durante las campañas electorales, como sujeto parte que fuera de los resultados referidos. Estamos convencidos de que la mejor suerte de este desafío, en beneficio de los intereses del conjunto de la sociedad, con la centralidad de los de los sectores populares, en un contexto político nacional, regional y mundial de dificultades complejas, va a depender de que las diferentes agrupaciones del frente seamos capaces de preservar y fortalecer la unidad de proyecto y base ideológica, en la diversidad que nos caracteriza, tal como lo lográramos en las elecciones, movilizando las esperanzas de la sociedad fueguina, las cuales no podemos frustrar.
Así nos lo enseñaron Néstor y Cristina, y así nos lo enseña, en la parte del kirchnerismo que como Nuevo Encuentro nos toca representar en el Frente para la Victoria, Martín Sabbatella.
Y así lo haremos, desde Tierra Del Fuego y para la Argentina toda: a defender lo conquistado; a resistir cualquier intento de recorte en los derechos ampliados; a ganar en 2017 y a volver en 2019, para restablecer y profundizar el rumbo recuperado en 2003, por todo lo que nos faltó realizar hasta acá.
Unidos, organizados, solidarios y movilizados, para la liberación. Hoy, como siempre y más que nunca, PATRIA SI, COLONIA NO.
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