Histórico: Luego de Perón, Argentina volvió a superar el 50% de la Participación de los Trabajadores en el PBI | Portal La TDF

Histórico: Luego de Perón, Argentina volvió a superar el 50% de la Participación de los Trabajadores en el PBI

Así surge de un informe del Instituto de Estudios Laborales y Sociales de la UCES. Responde a la política oficial de priorizar al Trabajador (Ya lo dijo la Presidenta "No soy neutral").
Uno de los factores para medir la Resdistribución de la Riqueza es la Participación de los Trabajadores en el Producto Bruto Interno (PBI). En síntesis, es que parte de las Riquezas generadas se llevan los Trabajadores y que parte se lleva el Capital.
El General Perón decía que había que alcanzar el "Fifty-Fifty" que consistía en un 50% para los trabajadores y 50% para el capital. De hecho lo logró en 1954, llegando al 50,84% de participación de los Trabajadores. Pero luego en 1955 fue derrocado por un Golpe de Estado.
Luego del nefasto Modelo Neoliberal instaurado en 1976 y profundizado en los 90, Argentina llegó al año 2003 con una redistribución del 38,2% para los trabajadores y 61,8% para el Capital.
A partir de la instauración del Modelo de Estado de Bienestar por el Presidente Néstor Kirchner, la participación de los Trabajadores en el PBI subió constantemente, hasta alcanzar en el año 2012 una distribución de 52,53% para los trabajadores y 47,47% para el capital.

2 comentarios :

  1. Viva Perón, Viva Evita, Viva Néstor y Viva Cristina!!!

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  2. El mal de la inflación-Sin definir la causa y menos acudir a conceptos básicos sobre economía.
    En todos los medios, radio, tv, impresos, conversaciones casuales , etc., sostienen que la maldita causa de la inflación exagerada en TDF, una de las mayores del país, es “culpa” de los sueldos de fábricas, sobre todo metalúrgicos, por la diferencia de sueldos mayor respecto a los sueldos de otras actividades; comercio, textil, municipal, etc., etc.
    Yo creo que estas personas tienen que leer o, en todo caso, volver a repasar, conceptos básicos sobre economía de mercado, parece difícil, pero es lo que el ciudadano común “toca” a diario, cuando sale de compras. Esto es nada más y nada menos que la “ley de la oferta y la demanda”.
    -A un aumento de la demanda proporcionalmente mayor al aumento de la oferta, los precios aumentan.
    -A un aumento de la demanda en igual proporción al aumento de la oferta, los precios no varían.
    -A un aumento de la demanda, si el aumento de la oferta es proporcionalmente mayor, los precios disminuyen.
    -Con la misma lógica se “juega” desde un punto de vista de disminución de la demanda, a aumento o disminución de la oferta, con la variación de los precios.
    En Argentina, en general, pasó algo, que, más aún se sintió acá en la isla; una reactivación en estos últimos diez años, una reactivación real, sana, esto es mayor actividad laboral desde empresas muy competitivas, eficientes, que producen ganancias y crecen, en contraposición a tiempos anteriores, donde al aumento de la actividad laboral con empresas generalmente estatales ineficientes, con gastos monstruosos sin ningún retorno en ganancias hundió al país en un déficit interno y en una deuda externa interminable. Ahora la empresa es competitiva, mundialmente incluso, no solo a nivel local, y se enriquece y reinvierte en largo plazo, y así cierra el círculo con mayor demanda de mano de obra.
    En Tierra Del Fuego, con la ley de promoción industrial, imán para la radicación de empresas de ensamblaje de primeras marcas electrónica, autopartes, textiles, electrodomésticos, etc., la oferta laboral creció más que en ningún otro punto del país, creando un “Polo Industrial”, demanda mano de obra capacitada, y sueldos que crecieron y provocaron una reactivación en la demanda de bienes y servicios mucho mayor proporcionalmente, a lo que aumentó la oferta de estos bienes y servicios, tal cual se cumple la Ley de Oferta y Demanda, los precios aumentan. Una demanda que, mientras la radicación de nuevas fábricas, y aumento del resto de la actividad laboral complementaria a la radicación de éstas, puede seguir aumentando su presión al aumento de precios, mientras la solución es aplicar mecanismos para aumentar la Oferta de bienes y servicios. No es culpa de un sector con una masa laboral muy superior al resto. Pero si es cierto que con la radicación de nuevos supermercados, para desmonopolizar la oferta, es la única solución, y romper con los precios “cartel”. Más supermercados y oferentes de muchos más bienes y servicios, variedad de marcas, y de firmas, que presionen en un aumento de la oferta, y por resultado precios más bajos. Es imposible otro efecto si las condiciones son las mismas, la ley de oferta y demanda se cumple en forma automática, no hay “control” que pueda evitar esa presión de la demanda, a una oferta que no “llega” a aplastar el nivel de inflación tan alto. Los controles producen desabastecimiento, se corta en varios puntos la cadena desde la fábrica al negocio de los productos afectados con estas medidas que nunca dieron resultado, por experiencia en otras épocas de “Precios Máximos” (en los 80’, p/ej.) acá en Argentina. Medidas nefastas son las de control impulsivo desde el gobierno.

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