Referentes de los barrios ubicados en el macizo KyD, incluidos en el proyecto de saneamiento y urbanización, destacaron la importancia del convenio y definieron que las obras cambiarán la vida de cientos de vecinos y vecinas.
Jorge González, del barrio El Cañadón aseguró que “es una alegría inmensa haber firmado este convenio, que le va a dar un saneamiento al barrio y permitirá trasladar a las familias que viven en muy mal estado, en condiciones muy malas”. “Agradecemos al Intendente Walter (Vuoto) y al Gobierno Nacional por poner en marcha este trabajo, avanzar en una ciudad integral para todos los vecinos y dejar de decirle a la gente, como les decían antes, que no tenían derechos. Los vecinos están muy contentos”, aseguró Jorge.
El referente de El Cañadón dijo que el convenio suscripto por la intendencia para desarrollar el proyecto de urbanización "marca historia", y agregó que “antes lo único que se veía es cómo atropellaban a la gente y les desarmaban las casas”.
Desde el barrio El Mirador, Mario Paulini dijo que “esto significa prácticamente todo, porque las necesidades que teníamos arriba eran todas, no había agua ni cloacas. Ahora empezaron a verse los resultados y la posibilidad de cambiar la calidad de vida, la salud”. “Hay gente que hace muchos años que vive ahí y pasaron muchas necesidades. Esto es un cambio de vida total”, concluyó Paulini.
Jorge González, del barrio El Cañadón aseguró que “es una alegría inmensa haber firmado este convenio, que le va a dar un saneamiento al barrio y permitirá trasladar a las familias que viven en muy mal estado, en condiciones muy malas”. “Agradecemos al Intendente Walter (Vuoto) y al Gobierno Nacional por poner en marcha este trabajo, avanzar en una ciudad integral para todos los vecinos y dejar de decirle a la gente, como les decían antes, que no tenían derechos. Los vecinos están muy contentos”, aseguró Jorge.
El referente de El Cañadón dijo que el convenio suscripto por la intendencia para desarrollar el proyecto de urbanización "marca historia", y agregó que “antes lo único que se veía es cómo atropellaban a la gente y les desarmaban las casas”.
Desde el barrio El Mirador, Mario Paulini dijo que “esto significa prácticamente todo, porque las necesidades que teníamos arriba eran todas, no había agua ni cloacas. Ahora empezaron a verse los resultados y la posibilidad de cambiar la calidad de vida, la salud”. “Hay gente que hace muchos años que vive ahí y pasaron muchas necesidades. Esto es un cambio de vida total”, concluyó Paulini.
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